Al inicio, el portillo se presenta inalcanzable. Ahora comienza la ascensión de la ladera que lleva al portillo de Bidarbide
Eslabones de montañerxs de una misma cadena humana, se suceden en el último tramo del ascenso, antes de llegar a la sierra de Sálbada
Marcha Social de las y los socios del club de
montaña Mendiko Lagunak
El día 20-04-2013 tomando el autobús a las 8:00 en
Amurrio y desplazamiento en el mismo hasta la zona recreativa y descanso de las
Campas de La Choza, en el cruce dirección Lendoñogoiti, dio comienzo la marcha
anual que el club Mendiko Lagunak organiza para sus socios/as.
En esta ocasión, el recorrido se diseñó con la
finalidad de recuperar antiguos y viejos portillos (Bidarbide, Atezabal) –hoy
en desuso o casi desaparecidos– y los desdibujados senderos que llevan a ellos,
por los que –aparte de otros más transitados– se llega y accede a la sierra de
Sálbada. Y también, con la intención de recuperar, poniendo en uso, caminos
olvidados que unían los pueblos de Saratxo y Amurrio y viceversa.
El tiempo y la temperatura acompañan el inicio de la
marcha y durante el ascenso a la sierra hasta bien arriba.
En esta imagen, la cascada con el fotógrafo cazado retratando
El comienzo de la subida es vertiginoso, no por la velocidad impuesta a las piernas, sino por el transcurrir de la orografía del recorrido, a través del denominado y señalizado “Sendero de la Choza”, que como el zoom de una cámara de fotos, acerca a las y los montañeros al objetivo del primer portillo (Bidarbide) –unas veces– y los aleja del mismo –en otros momentos del recorrido–. Y es que hasta comenzar a ascender la ladera –despejada de arbolado– de la sierra que sostiene dicho portillo, el camino es un continuo ir y venir de un lado a otro. Un ir de E. a W. y viceversa, atravesando pequeñas cascadas y riachuelos que estas crean.
Los adelantados esperan y observan a los rezagados que vienen en zigzagueante e individulizado ascenso por sendero casi imperceptible por la falta de uso montañero y de paso de animales
El ascenso de la ladera, en la que como referencia aparece a mitad de camino una torreta eléctrica como punto de referencia para los que desconozcan esta subida a la sierra, es pausado, zigzagueante y cargado de mucha paciencia.
El grueso de los animosos mendizales ascendiendo ordenadamente, uno detrás de otro por el zigzag del desdibujado sendero
Saliendo a la superficie de la sierra de Sálbada, a través del portillo de Bidarbide que se abre en la misma
El MdB junto al pequeño montañero-buzón, de tuercas y tornillos, a semejanza del de la cima de Babio. En este caso en miniatura.
La base del mismo reza: Bedarbide 1041 m. 17-05-1998
Detrás envuelto en la niebla: Iturrigorri. A la dcha. abajo: la mancha de agua del pantano de Maroño
Llegados a este punto hago notar (seguramente la o/y el lector avispado se habrá percatado de ello) que escribo “Bidarbide” (y no “Bedarbide”), pues creo que es la forma más correcta aunque no tenga –actualmente– constancia documental. Quizá alguien más entendido que el que esto escribe pueda aclararlo. Eso sí con la pronunciación átona en la “a”, que así pronuncian los mayores de los pueblos del entorno, situados en las faldas de la sierra.
Vuelta atrás –bordeando mayormente la cornisa– y en
descenso hasta el portillo de Atezabal
(dirección SE.) con la niebla y la fina lluvia que la misma trae de compañera
de viaje. (La cima que da nombre al portillo se encuentra en las proximidades
pero por causa de la compañía de la niebla, se deja para otra ocasión aunque el
que quiso sí se acercó a la misma).
Descendiendo por dicho portillo –nada transitado y con
cierta sensación de vértigo, visto desde arriba– y al poco de andar,
descendiendo unos metros a una cota más baja, la niebla se despidió para dejar
una mañana más apacible aunque menos que la disfrutada al principio del rodaje
de las piernas cuando se atacó el ascenso al portillo de Bidarbide.
Tras el reagrupamiento en el portillo de Atezabal, comienza el descenso con niebla y fina agua desde el mismo
El descenso es vertiginoso, en contínuo zigzag, guiándose por las hierbas altas que recuerdan el antiguo sendero, ahora borrado
Finalizado este descenso de la sierra de Sálbada, como queda dicho a través del portillo de Atezabal y por sendero casi borrado por su falta de uso, los mendizales prosiguieron por caminos marcados, alcanzando de nuevo la zona recreativa de las Campas de La Choza, donde les esperaba el avituallamiento con algunas viandas para contentar o satisfacer ¡quién sabe! el estómago.
Al paso por Lendoñobeiti, camino de Saratxo y Amurrio.
Arriba Iturrigorri envuelto en un manto de niebla y, asomando la cabeza, Ungino.
La niebla en la sierra de Sálbada: una constante en esta salida social del club amurriarra
Al cabo de unos minutos, para los más inquietos y media hora larga para el resto, se continuó por camino asfaltado que desde este cruce de carreteras, que se dirigen a Orduña, Lendoñogoiti y Mendeika, conduce al pueblo de Lendoñobeiti. Desde este pueblo y en paralelo al arroyo de La Barrerilla, que se reviste de río cuando lleva abundante agua, se llega al barrio Cárduras en el pueblo de Saratxo, por donde prosigue la marcha (atravesando el pueblo) en dirección al caserío Agirre, a los pies de la falda E. del monte Burubio.
Al saltar al otro lado de la barrera esperaba un suelo fangoso que sepultó las botas a alguno que otro
Caseríos Mendiguren.
El de la dcha. deshabitado, pertenece a Saratxo. El de la izda. (la mitad deshabitado) pertenece a Amurrio. Entre ambos la línea divisoria de los dos pueblos
Cº Mendiguren de Saratxo |
Siguientes destinos y último kilómetro hasta llegar a
Amurrio: Venta de los Trigueros, Monte de los Ahorcados o Mendigorrial lado de cuya cima estuvo el basurero o vertedero oficial del pueblo de
Amurrio hasta hace unas décadas en que fue sellado.
Barrio Mendixur de Amurrio, donde la torre y antigua cárcel de su nombre le cedió el mismo.
El caserío con tejado "cola de milano" es conocido con el nombre Bonaparte (Huelga explicar porqué).
Asomándose, entre el arbolado, el edificio del antiguo reformatorio de El Salvador. ("El Refor"). Lugar de recreo y esparcimiento de amurriarras.
Detrás asoma el monte Altirima o Eltrimen, cubierto de arbolado.
Los pabellones del fondo: la fábrica Megaplast (ahora Megatech Industries) que más mujeres emplea en Amurrio
Ducha, cambio de muda y a llenar y calentar el estómago con la alubiada popular en la sede de Mendiko Lagunak mendi Taldea de Amurrio a eso de las 15:00. Alubiada preparada por socias y socios que gracias a su jubilación y experiencia acumulada en el quehacer culinario, permitió saborear el rico sabor del singular plato gastronómico. Dando así por concluida esta jornada montañera de la Marcha Social de socios y socias de este año 2013 de dicho club.
Aquí confluye y concluye el recorrido de esta Marcha Social, al poco de bajar del Monte de los Ahorcados-Mendigorri.
Izda.: Cº Mendigorri; enfrente caserío (¿quizá donde estuvo caserío Iritxusi/Intxausi?) en el que vivió el último alcalde de la República de 1931. Este caserío tuvo su hermano gemelo en el otro extremo de la carretera N-625 que fue derruido en mayo de 2012.
Formando una isla: fuente pública con ornamento de 1930.
Ver siguiente entrada El caserío que venció a la carretera pero sucumbió a la acera
Una anécdota: Una pareja que debía asistir a una boda, deambula perdida con su coche en el pueblo de Lendoñobeiti, intentando encontrar la dirección que les lleve al Santuario de la Antigua de Orduña. Ante su supina desorientación se les indica el camino correcto. ¿Cómo irían a dar con este lugar antes que con el destino de su viaje placentero? Decididamente no eran de aquí. De más allá. De mucho más allá para tener que equivocarse de esta manera tan alocadamente.
Y lo mejor viene ahora. Comentando el incidente con el
vecino que a la puerta estaba, asevera que dicho coche había seguido al suyo
desde Orduña hasta aquí. Es decir, que habían pasado junto al santuario mariano,
de tanta devoción en Orduña y su entorno, sin reconocerlo. Lo dicho. No eran de
aquí pero tampoco de más allá, sino de mucho más lejos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario