
Renovado azulejo con la denominación actual de la Villa y municipio. (Para saber sobre la controversia que hubo a la hora de escoger el nombre “Artziniega”, adentrarse en el enlace http://arceniega.blogspot.com.es/)
Cartel-anunciador de la VI Marcha ARTZINIEGA
VI Marcha montañera ARTZINIEGA
Pasadas las 09:30 del 01-03-2015 se da inicio a la marcha de recorrido corto (12 km) de
los dos de que se compone la VI Marcha
montañera ARTZINIEGA. Memorial José
Mª Yarritu <YARRI>. (Ver
Nota 1). (La larga se inició a las 8:00 y su recorrido constaba de 25 km).
La falta de entrenamiento
o la escasez de salidas montañeras realizadas hasta hora, hizo que la elección
del recorrido a andar fuera la marcha corta, a lo que se añade el tiempo
padecido durante la semana que hoy termina que no ha cesado de llover
intensamente ningún día de la misma. Situación ésta que ha producido que el
itinerario estuviese enfangado y embarrado en gran parte del mismo ya que a
poco que pisaras, el fango y el barro harían su aparición. Se puede decir que
había determinados tramos de auténtico barrizal semejante al chocolate.
El paso del arroyo Zaballa, al principio del recorrido, se las trae
Nada más salir de la Villa de Artziniega, en el término de Zaballa, el suelo se convierte en terreno
embarrado acercándonos al arroyo Zaballa, al que hay que sortear a través de
unos palés puestos para la ocasión.
A continuación se cruza
el antes pueblo de Mendieta y ahora barrio de Artziniega, ya que con la
anexión a la villa perdió su personalidad jurídica al igual que los otros tres
pueblos anexionados donde tienen también la aplicación del Fuero de Ayala –Soxoguti,
Retes de Tudela y Santa Coloma–. Yo prefiero seguir llamándolos “pueblo”,
aunque les hayan desposeído de sus bienes comunales y del término
jurisdiccional. No poseen “Junta Administrativa” que los gobierne.
En las cercanías del barrio abandonado de Las Llanas
Un momento de dispersión y tranquilidad en el recorrido
Seguidamente nuestros
pasos nos acercan al pequeño núcleo de Las Llanas (dos caseríos y una
ermita o iglesia abandonados y en estado de ruina son los únicos vestigios, ¡una
pena!) que lo atravesamos por detrás y en altura para acercarnos a un grupo de
caseríos (algunos habitados), siendo el primero en alcanzar el denominado
caserío Palacio.
Al poco de dejar atrás el caserío Palacio, el camino empedrado se presenta de esta guisa, a modo de una gran muralla de troncos apilados que limitan la visualidad de lxs montañerxs, a los que empequeñecen. Aquí Xabier está sonriente, poco después vendría la verticalidad (y prolongada) subida para coronar el Alto de Pando
Dejados atrás los mismos,
el camino -ahora pista forestal y suelo de grava- es custodiado por hileras de
troncos de pinos talados y dispuestos ordenadamente.
Poco después de atravesar
este parapeto de troncos en hilera, viene lo bueno del recorrido por no
utilizar una palabra malsonante, impropia de un auténtico montañero. La pista
forestal comienza a empinarse en una verticalidad que asusta y que no termina
hasta llegar a la cima del monte Pando
(545 msnm) (“553 m” según el último “Catálogo de cimas de Euskal Herria”, editado
en 2014).
El buzón no engaña. Hemos llegado a la cima del monte Pando...
...y, para el MdB, es la ocasión de retratarse junto al mismo, aquí colocado por el club de montaña "Gazteiz" de Vitoria-Gasteiz, al cual se le ve "nuevo". Ha debido de ser repintado
En el recorrido de subida
a la cima del Alto de Pando se añaden y nos sobrepasan los mendizales y más de
un korrikalari que están desarrollando la marcha o recorrido largo y que en
este tramo se junta y discurre paralela y coincidente con la marcha corta.
... Y, para los más, es el momento y la hora de reponer fuerzas
A las 11:15 se holla esta cima donde hay
control de verificación de la Marcha y, para muchos, es el momento del hamaiketako con lo que traen en sus
mochilas. A dicha cima se accede entre bojs que la ocultan, encontrándose en la
misma un vértice geodésico y el inevitable buzón montañero.
Cumplida la misión de
alcanzar el Alto de Pando, comienza el descenso para llegar a la Villa de
Artziniega. Descenso suave pero prolongado por pistas forestales que zigzaguean
en su diseño, dejando a un lado el barranco de La Billarra. De cuando en cuando,
se vadean pequeños arroyos o regatos que cortan el camino, a través de rudimentarios
e improvisados puentes -hechos con ramas- que salvan los díscolos arroyuelos.
Principalmente, el Sandolla (o Sandoia) y el Barrataguren.
Lo dicho del terreno a pisar y pisado no es mentira. Estas fotos así lo atestiguan. Lo mismo, sobre el obligado vadeo de impetuosos regatos que asaltan el camino a transitar. El improvisado puente de ramajes es la solución
Finalmente pequeño repecho
para llegar al “pueblo” de Mendieta (el entrecomillado por lo dicho sobre la
pérdida de su personalidad jurídica) pero bastante antes ya se divisa en la
lejanía su imponente torre de los Mendieta y Salazar.
La inhiesta Torre Mendieta en el pueblo de su nombre nos avisa que nos estamos acercando...
... aunque todavía queda por sortear algún que otro improvisado puente
La Torre, en parte convertida en vivienda, nos confirma que estamos en el "pueblo" de Mendieta.
Los más jóvenes mendizales también hicieron "historia". Aquí les vemos en Mendieta,... uno de ellos saciando la sed de cansancio
Haciendo la entrada en el casco de la periferia de la villa artziniegarra
Morcillas, morcillitas... ¿quién os va a comer?
Todas y todos los presentes, y los que van llegando, se cobijan en el frontón, bajo la nueva cubierta, para degustar el premio de su sacrificio. Al lado, tras las columnas de hierro, la bolera o bolaleku
Hay colas en las dos fuentes improvisadas para la limpieza del calzado. No era para menos, ya que nadie se ha salvado en el intento de evitar embadurnar, con el pegajoso barro, sus botas o zapatillas de trekking.
Descalzo y... hasta las plantillas se lavan.
Aquí el benefactor de la Villa, D. Eugenio Garay Rivacoba, contempla pacientemente desde su pedestal, y sin que nada le perturbe, la labor del lavado de botas.(Para conocer su figura, asociada a la traída del
tranvía a la villa artziniegarra, adentrarse en https://toponimia.wordpress.com/2009/09/30/artziniega-y-el-tranvia/
En Mendieta me topé con
parte de la saga Furundarena de
Amurrio. Tío y sobrino en compañía de otros montañeros se detuvieron para
observar y contemplar la torre Mendieta y de paso me pidieron que les sacase
unas fotos, aprovechando el momento propicio para exponer o soltar unas pocas
notas de la historia del pueblo y de Ayala. Luego siguieron su camino y yo
detrás procurando enfangarme lo menos posible con el chocolate que se
presentaba pasado Mendieta, es decir, el mismo –ahora aún peor, pues estaba
pisado de antes– que encontramos al iniciar la marcha.
Recorrido o Marcha
larga: Salida 08:00 y
25 km
Artziniega - Soxoguti -
Otsati (521 m) - Benta - Erretes Tutera - Peñalba (692 m) - Santa Koloma -
Pando (547 m) - Artziniega
Recorrido o Marcha
corta: Salida 09:30 y
12 km
Artziniega - Mendieta -
Pando (547 m) - Mendieta - Artziniega
Recordar que estas
marchas montañeras de Artziniega las organiza el club de montaña de dicha
villa: Ganzorrotz Mendizale
Taldea. Su web es: http://ganzorrotz.wordpress.com.
Placa homenaje a la última corporación republicana represaliada por el franquismo en 1937 que está colocada en la fachada principal de la Casa Consistorial (anteriormente Casa Cuartel de la Guardia Civil) del Ayuntamiento de Artziniega
(1) José Mª Yarritu “YARRI” (31-12-1953/10-02-2002) fue una persona entrañable, especialmente para los que tuvieron la suerte de conocerle, que nos dejó tempranamente a los 48 años tras una larga enfermedad. De él se debe destacar, a parte de sus valores como persona, su libro póstumo “Recorridos por Artziniega y sus alrededores” donde, como el título indica, describe distintos itinerarios para recorrerlos que, de paso, sirven de excusa para conocer el entorno de la Villa de Artziniega y municipio de su nombre. Pero no sólo es eso el libro del que es autor, sino que en el mismo se adentra también en la historia, etnografía, patrimonio, etc. de la Villa y su alfoz. Es autor de la descripción de los distintos portillos o pasos de acceso a las sierras de Sálbada y de la Carbonilla, publicados previamente en revistas especializadas como Pyrenaica, que en este libro son nuevamente protagonistas. El libro está editado en 2005 por la Diputación Foral de Álava.
No hay comentarios:
Publicar un comentario